Conversaciones difíciles y el rol que juegan tus creencias…
- Solange Letelier
- 26 abr 2024
- 3 Min. de lectura
Te invito a revisar contenido de tu interés, creado con cariño para ti.
#calidaddevida #saludmental #solletelier #coachestrategico #bienestar #creenciaslimitantes #elpoderestaenti #gestionemocional #gestiondelcambio #liderazgopositivo #liderazgo
Cuando le expresas a una persona de confianza todo acerca de un problema, pero no se lo mencionas a la persona con quien lo estás teniendo…
Si te pasas pensando en el problema y repitiendo las cosas que te gustaría decir…
Si presentas síntomas físicos (disfonía o dolor de estómago) cada vez que estás con “esa” persona…
Es tiempo de tener una conversación valiente…pero te has preguntado ¿Por qué te resulta difícil poder hacerlo? Lo primero que debemos consensuar es que es una conversación difícil y vamos a entender por ello cualquier conversación sobre la cual existe algún grado de ansiedad en la cual sientes que hay riesgos y que se puede deteriorar la relación. Aquí algunos ejemplos:
• Levantar un tema sensible con un colega o dentro del equipo
• Dar retroalimentación que no se va a recibir bien
• Pedir ayuda a una persona crítica que no está dispuesta a darla
• Tener una opinión muy distinta en tema importante donde hay diferencias valóricas
• Conversar con tu pareja de algo que te molesta
• Hablar con tu hijo adolescente para poner límites, etc.
Sin duda son muchas las conversaciones difíciles que tenemos a lo largo de nuestras vidas y la pregunta que sigue es que tienen que ver nuestras creencias al respecto, ellas pueden influir significativamente en la forma en que abordamos y gestionamos conversaciones difíciles en el trabajo y en la vida en general, recuerda que son nuestras creencias las que determinan nuestra forma de relación con el mundo que nos rodea.
Si una persona tiene la creencia de que el conflicto es siempre negativo o que debe evitarse a toda costa, es probable que evite conversaciones difíciles por miedo a las consecuencias. Por el contrario, si alguien ve el conflicto como una oportunidad para el crecimiento, la resolución de problemas y la mejora de las relaciones, es más probable que aborde las conversaciones difíciles con confianza y determinación.
Las creencias sobre la comunicación, como "no soy bueno para expresar mis emociones" o “tengo miedo a perder a mi trabajo” o "nunca sé qué decir en situaciones difíciles con mis hijos" o "si digo lo que realmente pienso, perderé la relación", pueden generar ansiedad y evitar que alguien se comunique de manera efectiva muchas veces empeorando la situación porque el problema persiste por miedo a dañar las relaciones interpersonales o por temor a la frustración o el fracaso.
De ahí la importancia de poder mirar nuestras creencias, identificarlas y gestionarlas para fortalecer nuestra confianza y capacidad para enfrentar estas conversaciones que más de un dolor de cabeza nos traen. Comunicarse abierta y honestamente y sentir que tienes las habilidades para manejar conversaciones difíciles de manera constructiva pueden fortalecer tu confianza, creando posibilidades de encontrar soluciones mucho más positivas y te llevan a fortalecer y mejorar la relación contigo y con los demás.
Aquí un decálogo para sostener una conversación difícil
1. Crear la oportunidad de la conversación, mirando previamente tu patrón de creencias, identificando aquellas que limitan posibilidades, cuestionarlas y cambiarlas por otras más movilizadoras. Una forma de encontrarlas es buscando soluciones, enfócate en encontrar soluciones constructivas que satisfagan las necesidades de ambas partes.
2. Señalar que darás una opinión personal acerca de algo que te importa sobre el trabajo en conjunto o la manera en que se están relacionando.
3. No juzgar a la persona (el SER) sino que sus acciones (el HACER).
4. No decir cómo son las cosas, sino como tú las ves o te afectan.
5. Habla en primera persona (yo veo las cosas así, a mí me pasa que…).
6. Mencionar por qué es importante (qué es lo que te preocupa o importa, cuáles son los efectos que tú ves en la relación).
7. Fundar tu opinión (señalar supuestos, estándares y hechos).
8. Practica la escucha activa y muestra empatía hacia la perspectiva de la otra persona, incluso si no estás de acuerdo.
9. Pedir un cambio de conducta concreto, negociar y cerrar con un compromiso.
10. Agradecer la conversación.
Te invito a revisar tus creencias y cómo estás pueden influir en la forma como percibes y enfrentas las conversaciones difíciles. Al desafiar y transformar tus creencias limitantes, puedes mejorar tu capacidad para comunicarte de manera efectiva, resolver conflictos y fortalecer tus relaciones interpersonales tanto en el trabajo como en la vida personal.
Te gustaría llenarte de posibilidades de éxito y bienestar. Te invito a revisar como podemos trabajar juntos a través de mis procesos terapéuticos y taller.
Un abrazo,
Sol Letelier
Comments